La mentira

Mentir o no mentir. Esa es la cuestión. El problema es que no se hacerlo, cuando lo hago me pongo profundamente nerviosa y tartamuda. Mi abuelo, me dice que existen las mentiras piadosas, yo no creo en eso.
Vivimos en una sociedad que piensa que las mentiras piadosas son lo mejor.
Mentimos, sobre nosotros mismos, sobre nuestros sentimientos, sobre lo que nos molesta o simplemente sobre lo que no queremos. Tal vez, sea mejor omitir. No se.
Prefiero las cosas al hueso.
Cuando era niña tuve muchos problemas por decir siempre la verdad, casi me echan del colegio, me quede atrasada un año en periodismo. La gente me miraba como bicho raro.
Tampoco sabía decir que no.
Ahora sí lo hago, y acúseme de agresiva.
Será.
Pero creo, que ahora más sabia y vieja el hecho de decir la verdad, me ha hecho tener relaciones más sanas, sólidas.
¿Qué pasaría si la Mariela, no me dijera siempre las cosas, auque a veces duelan, o la Patty con su peculiar forma de ser, o mi niño lindo Hori?
Muchas veces, debí hacerles caso con las cosas, especialmente con el Ismael, con respecto a decisiones que retrace mucho, o cosas que simplemente no hice.
Cómo me dijo una vez el señor Pedro Córdova, Evelyn nunca pierdas la perspectiva.
Ellos, son mi perspectiva, mi cable a tierra.
Y todo esto partió por una conversación con claudis, en la cual le decía que necesitaba una especie de Buda, como pareja para que me tranquilizará... Jajajaja.
Te conosco mosca, me dijo.....
Por eso digo, no se mentir.
Soy el maldito alacrán.

1 comments:

Anonymous said...

jajjaa......Una vez me dijiste Soy yo hasta los poros..